Responde el teléfono sin ganas. En su celular un numero desconocio amenaza molestar con la duda intangible de que sea el que sea, me quedo con la duda de quien fue.
Le contestan del otro lado. Le monologan un rato. Total ella no paga. Paga el del otro lado. Sea quien sea.
Le dicen cosas al oido (a donde sino). Pero no le susurran, le gritan, le gritan, pero no porque se enojaron, sino porque estna desesperados. Una voz del otro lado del satélite distorsionada y oblicua repita frases que Clara ahora prefiería no poder repetir. Es como una masacre. En algun lado hay una masacre, un incendio un algo.
Se imagina todo eso mientras mira el numero desconocido.
Me quedaré con la duda. Piensa.
Su ringtone es una sirena.
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