jueves, junio 16, 2005

clandestino

No me importa ese silencio clandestino cuadra tras cuadra, camino tras camino. Lo único que puedo hacer es prestarle atención tal como se le presta atención al bullicio de un monton de gente reunida que gritonea en la misma jerigonza. Hago eso, escucho cada una de las voces que arman y componen el bullicio, y las escucho como si fueran únicas, irrepetibles, como si cada una de ellas me dijera algo, hasta que sin darme cuenta, empiezo a escuchar todas juntas. como una sola, como si cada una fuera un silencio, que hace ruido, tras las cuadras.

No hay comentarios.: