Retazo de viento muerto en alud
pelambre suelta, dos disparos.
Entre el vino de mamut y ataud,
cuerpo desnudo intacto.
Seguido acto, sin la falta
camisa blanca y pies desnudos
hijos del viento y de la nada
molieron vidrio y picaron cacto.
No te queda ni la última cobardía
en el medio de los ojos, decía
Sólo te resta el sabado y la memoria.
No te queda ni el último balazo
decías,
Solo te queda el mar.
sábado, abril 30, 2005
viernes, abril 29, 2005
Poema sin nombre
No existe el desacierto, ni la lágrima
si es que después de un tren espera
su mágica mirada y suena a dádiva
su esperanza y su cosecha.
Anden de ojos oscuros, y trenes blancos
y bolsas solas sin relleno mas que trapos
diario rezo entre un pasaje y otro
dos caminos te llegaron pronto.
Y si de una primavera se te escapa la sonrisa
ya no le escuches solo dejala caer
dentro del vagon, dentro del tren
Porque no suena un silbato entre viajes
como no llega él a su destino sin
una bolsa blanca sin andén.
si es que después de un tren espera
su mágica mirada y suena a dádiva
su esperanza y su cosecha.
Anden de ojos oscuros, y trenes blancos
y bolsas solas sin relleno mas que trapos
diario rezo entre un pasaje y otro
dos caminos te llegaron pronto.
Y si de una primavera se te escapa la sonrisa
ya no le escuches solo dejala caer
dentro del vagon, dentro del tren
Porque no suena un silbato entre viajes
como no llega él a su destino sin
una bolsa blanca sin andén.
miércoles, abril 27, 2005
El hueco
Nadie queda ya, es sólo una pared
y del otro lado, es un hueco.
No le tengo demasiado desdén al después
sólo le temo, un poco.
Después de la puerta cerrada,
de la radio apagada, de la noche helada
sonó una última canción, gastada.
No se oyó.No se oyeron tus pasos
Ni los del rey, ni los nuestros
ni se oyeron los tintineos
ni los reproches
ni el portazo.
Me separa un hueco de distancia
entre el último recuerdo que tengo
y lo que en realidad pasó.
Me separa un hueco, de eco
de lo que sos.
(El hueco no está
en la pared,
en mi cuerpo)
y del otro lado, es un hueco.
No le tengo demasiado desdén al después
sólo le temo, un poco.
Después de la puerta cerrada,
de la radio apagada, de la noche helada
sonó una última canción, gastada.
No se oyó.No se oyeron tus pasos
Ni los del rey, ni los nuestros
ni se oyeron los tintineos
ni los reproches
ni el portazo.
Me separa un hueco de distancia
entre el último recuerdo que tengo
y lo que en realidad pasó.
Me separa un hueco, de eco
de lo que sos.
(El hueco no está
en la pared,
en mi cuerpo)
sábado, abril 16, 2005
Retoños del
Si de seduccion se trata, claro está que no puedo olvidarme del Turco Romero. Ningun episodio de la adolescence está ayuno de sus anécdotas, de sus idas y vueltas. El turco se ata a la historia nuestra (a la de todos nosotros) como se trenza una fibra a otra y a otra a la una para dar una trenza, y es casi imposible... como se dice... ayudame Vasco.¿Separarnos? No. no, separarnos no. Separarnos suana a que, paf, tenes que agarrar una cosa y aislarla de la otra.Esto es mas bien como si, por ejemplo, los fideos...
No digas giladas Richard, el Turco era un gil como todos nosotros, en esos años. Como todos nosotros ahora, un tarambín culquiera, no se que refilón te agarró con Romero. Lo que pasa es que hay cosas que vos no sabes, sinó...no se como lo adulas tanto.
Si yo no lo adulo tarambón, a vos que te picó budinazo. Lo que pasa es que bueno el cajeta tenía sus dotes. Eso no me lo nieges. Preguntale a la Turca sino. ¿que le vas a preguntar a esa turra si cuando me acuerdo que escapotó la guita del Dana y se refungó con el otro estopa de Nacho Vieites, ni me dieron ni de guindarmela. No, con esa gilanca no se puede ir a ningun lado. si yo te digo otoño, agarrate las hojas, Richard.
Cuando se trata de episodios y de cosas esquizoides a Richasr le pasa lo que a todos empiezan a contar y no paran no paran deciden comenzar por la parte mas jugosa y como si nada ya estan hablando de una mina o de otra variable prístina de la memoria como las tetas de la Turca Richard como todos ellos babosea un poco las guampas adula un cacho Despues clava la birra servida en el jute de vidrio con esa ratonga grande por donde pasa su mano, y empina la mandíbula hasta que el jute le queda casi vacío y se ve la cara de Pick que lo mira del otro lado de la birra, translucido por el jute, y depormado por el culo del jute que es de un vidrio mas duro yca constante de refraccion del vidrio respecto del aire y los lentes y la reflexion
LCG 2005
No digas giladas Richard, el Turco era un gil como todos nosotros, en esos años. Como todos nosotros ahora, un tarambín culquiera, no se que refilón te agarró con Romero. Lo que pasa es que hay cosas que vos no sabes, sinó...no se como lo adulas tanto.
Si yo no lo adulo tarambón, a vos que te picó budinazo. Lo que pasa es que bueno el cajeta tenía sus dotes. Eso no me lo nieges. Preguntale a la Turca sino. ¿que le vas a preguntar a esa turra si cuando me acuerdo que escapotó la guita del Dana y se refungó con el otro estopa de Nacho Vieites, ni me dieron ni de guindarmela. No, con esa gilanca no se puede ir a ningun lado. si yo te digo otoño, agarrate las hojas, Richard.
Cuando se trata de episodios y de cosas esquizoides a Richasr le pasa lo que a todos empiezan a contar y no paran no paran deciden comenzar por la parte mas jugosa y como si nada ya estan hablando de una mina o de otra variable prístina de la memoria como las tetas de la Turca Richard como todos ellos babosea un poco las guampas adula un cacho Despues clava la birra servida en el jute de vidrio con esa ratonga grande por donde pasa su mano, y empina la mandíbula hasta que el jute le queda casi vacío y se ve la cara de Pick que lo mira del otro lado de la birra, translucido por el jute, y depormado por el culo del jute que es de un vidrio mas duro yca constante de refraccion del vidrio respecto del aire y los lentes y la reflexion
LCG 2005
Elenora
Todo esto es una enumeración absurda, piensa él. Los hombres y las mujeres saliendo a chorros, por una lata con agujeros de vidrio que atraviesa la tierra. Eleonora es un fantasma que sólo él puede ver cuando llega a la estación Octubre. Enumera todos y casa uno de los objetos que llegan hasta sus pupilas. Empieza con su nombre, y la lista sigue, hasta que sin darse cuenta reconoce sentado en el banco, al lado del puesto de diarios, no bien está por irse el coche hacia la siguiente estación, un objeto de Eleonora. Esta vez, fue un guante.Quizás un colgante, o un gorro, porque el invierno dezasna de frio las dudas del coco. Se sienta mira y anota, Marcos...y no para, te juro que no para, mira pupila a pupila, segundo a segundo hasta Eleonora. Ahi se calla y la sigue. pero la vuelve a perder, en el chorro de gete que sale disparado hacia la escalera mecánica, y de ahí a las calles, tal vez al subsuelo, y de allí a sus mundos, tal vez a sus casas, familias, novias hijos mascotas cervezas, estaciones trabajos, silencios hijos, sillas, camas, Eleonora. Todo esto es una enumeración absurda.
viernes, abril 15, 2005
Si,
Si me quedo pensando, refloto, armo el juego, doy la vuelta cruzo el puente, toco el timbre, subo las escaleras me cuelgo de la baranda, miro por la ventana que da al patio, tiro el pucho en el cenicero del rincon , si espero dos segundos, si trago el aire, si muerdo uno a uno los dientes, antes de levantar la mano para abrir la puerta de un golpe es.
Porque siento que a veces, ella me escucha del otro lado de las paredes. Ella sabe. No me persigue su voz. Claro que la escucho levantarse temprano, irse rapido desde la cama hasta el baño, a lavasrse los dientes, cepillarse y hacer ruido, el ruido de la cañilla, despues los tacos que realparecen desde la madera.Un silencio hasta entrar a la ducha, el sonido del agua, la voz cantante de la mañana, mientrs yo, del otro lado de la cosa, reabro un ojo cuyo ultimo recuerdo visto ha sido la ventana oscura la noche anterior.La luna descansando atras de todo, los cables que cuelgan el alumbrado, los postes, un arbol que ahora se vería verde y el cielo, opaco.
LCG 2005
lunes, abril 11, 2005
Mas allá de las sierras
Se queda una nube temblando,
hay una radio lejana que
escupe un tango.
Da vueltas la nube alejada
y se prende el sielencio
un rato.
Me mira la nube saltando,
me nubla, envuelve
y dice que lo que
veo es
Dar vueltas a una nube
que
envuelve un poco
y
deja volar la noche
mas alla
de las sierras.
Y si una luna, si una sola luna se
acuerda de que no puede contra
la nube rota
tengo que correr entonces
y retomar la historia
que me nombra
hay una radio lejana que
escupe un tango.
Da vueltas la nube alejada
y se prende el sielencio
un rato.
Me mira la nube saltando,
me nubla, envuelve
y dice que lo que
veo es
Dar vueltas a una nube
que
envuelve un poco
y
deja volar la noche
mas alla
de las sierras.
Y si una luna, si una sola luna se
acuerda de que no puede contra
la nube rota
tengo que correr entonces
y retomar la historia
que me nombra
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